"Desperté esta mañana con un dolor de cabeza insoportable. ¡Pensé que la cabeza me iba a explotar!".
"Me doy cuenta de que a medida que avanza el día, la tensión en mi cuello empeora, y me comienza a doler la cabeza generalmente entre las 2 y las 3 de la tarde".
Declaraciones como estas son comunes en los formularios de historia clínica que los pacientes completan cuando buscan atención quiropráctica para sus dolores de cabeza. Muchos pacientes preguntan: "... ¿Qué es un dolor de cabeza?" The National Institutes of Health (NIH) describen cuatro tipos de dolor de cabeza: Vascular, contracción o tensión muscular, tracción e inflamatorio.
La forma más común de dolor de cabeza vascular es la migraña. Las personas que padecen migraña suelen quejarse de dolor intenso en uno o ambos lados de la cabeza, náuseas o vómitos y, a veces, cambios en la visión. A menudo hay una mayor sensibilidad a la luz o al ruido, que provoca que las personas que padecen migrañas se acuesten en una habitación oscura y tranquila hasta que pase la migraña. Las mujeres tienen más probabilidades de sufrir migrañas que los hombres y la gravedad de los síntomas puede ser tan extrema que se debe detener toda actividad hasta que pase.
El siguiente tipo más común de dolor de cabeza vascular es el dolor de cabeza tóxico producido por la fiebre. Otros tipos de dolores de cabeza vasculares incluyen las cefaleas en "racimos", que se caracterizan por episodios repetidos de dolor intenso que comienzan en un lugar y se extienden. Estos pueden durar de solo unos minutos a una hora, pero conllevan un nivel muy alto de dolor e intolerancia a la actividad. Otro tipo común de dolor de cabeza vascular es el que resulta de la presión arterial alta.
Los dolores de cabeza por contracción muscular o tensión, implican tensión en los músculos faciales y del cuello. A menudo comienzan en el cuello y se irradian sobre la parte superior o hacia los lados de la cabeza. Los músculos del cuello suelen estar extremadamente tensos y sensibles y, a menudo, una presión moderada aplicada con el dedo o el pulgar a estos músculos, provocará un dolor que se irradia hacia y/o sobre la parte superior de la cabeza. Esto también puede resultar en una intolerancia significativa a la actividad, pero generalmente no tan grave como la migraña o la cefalea en racimo.
Los dolores de cabeza por tracción e inflamatorios se deben a otras afecciones, que van desde una infección en los senos nasales hasta un accidente cerebrovascular. Estos tipos de dolores de cabeza pueden servir como una señal de advertencia de una afección más grave o significativa. Otro ejemplo es la meningitis, así como otras afecciones que afectan los senos nasales, la columna vertebral, el cuello, el oído y los dientes.
El NIH sugiere que, cuando los dolores de cabeza ocurren tres o más veces al mes, "...un tratamiento preventivo es generalmente recomendado". Ciertamente, en algunos casos, la medicación puede estar indicada, pero solo después de descartar una afección más grave y después de agotar tratamientos menos invasivos que conllevan menos efectos secundarios.
The American Chiropractic Association (La Asociación Americana de Quiropráctica) recomienda:
- Evite períodos prolongados de permanecer en una posición (computadora, máquina de coser, lectura, entre otros) y tome descansos para ejercicios de estiramiento/rango de movimiento del cuello cada ½ a 1 hora.
- Ejercicio: Caminar, aeróbicos de bajo impacto.
- Evite apretar los dientes (debido al esfuerzo de la articulación temporomandibular - ATM o mandíbula).
- Beba mucha agua, manténgase hidratado.
La atención quiropráctica puede incluir manipulación de la columna (ajustes), asesoramiento nutricional (sugerencias dietéticas, opciones de vitaminas/minerales como el complejo B), ejercicio, reentrenamiento de la postura y técnicas de relajación.